Campeones

Ser campeón en el fútbol infantil es un paso más en el proceso de aprendizaje y de formación de los chicos como personas. Sumar títulos a la vitrina no significa ser el mejor club ni asegura el futuro deportivo de la institución. Sin embargo, es bueno cada tanto permitirse un festejo.

Hoy por la tarde el globo salió campeón, derrotó 2-1 a Pampero en un clásico apretado, disputado, que Huracán dominó ampliamente, poniendo la pelota al piso, jugando, yendo a buscar el resultado, convencido, levantándose luego de comenzar perdiendo.

El resultado tal vez quede en la historia como una linda anécdota para la Institución y para los campeones, en cambio sí quedará en la memoria la entrega, la caballerosidad, la personalidad, el respeto, el compañerismo, la valentía que demostraron los chicos y el cuerpo técnico.

En un momento del partido, faltando quince minutos, Juan Ludueña, tranquilo, de brazos cruzados a un costado de la línea de cal, se da vuelta al banco de suplentes y le dice a Joaquín Campo “Campo, ahora usted vaya a calentar”. Decirle “Usted” a un chico, hablarle bien, con respeto, esa es la lección de moral que los grandes tienen que darle a los más jóvenes. Por eso el resultado es una anécdota más que nos vino muy bien a toda la gente del globo que trabaja incansablemente, que alienta, que acompaña a todos lados, esa gente que siempre es muy seguidora y fiel. Siendo la minoría el afecto es más caluroso.

La victoria fue moral.

En una tarde muy fría, con la cancha poseada y el viento dribleando entre el alambrado de Alpachiri, después de ver la vuelta olímpica de Club Darregueira por penales en séptima división y de Sportivo en el clásico en quinta división, salieron los dos equipos de Guatraché en busca de la corona de la categoría mayor.

Pampero comenzó bien plantado en el mediocampo con ese pichón de Fernando Redondo que es Paulo Pantanetti, sin embargo, el frío inicial se fue entibiando y el globo comenzó a marcar territorio en la cancha.

Cuando Huracán había mejorado y estaba empezando a hacerse de la pelota llegó el gol de Pampero. Fue un tiro de media distancia que le picó mal a Gonzalo Yeguer y se le escurrió al fondo del arco. La Estrella se adelantaba en el marcador para el festejo de la gente que acompañó hasta Alpachiri.

El grito fue efímero, Huracán empató al toque sin dar respiro tras un tiro libre de Adrián Braun desde la izquierda y posterior cabezazo débil de Diego Díaz que se le escapa al arquero de Pampero y se mete. Ambos goles fueron acompañados de poca fortuna para los arqueros.

Con el empate el que siguió pensando en el arco rival fue Huracán y la insistencia tuvo premio antes de terminar el primer tiempo con otro centro de Adrián Braun vino el segundo con un cabezazo de Emanuel Villar.

Se define

En la segunda etapa Pampero se partió, Huracán pudo conseguir dos o tres goles más pero la victoria ya estaba encaminada porque la estrella no mostraba respuestas anímicas y porque el fondo de Huracán hoy estaba impasable.

Cada jugador de Huracán sabía lo que tenía para dar y en esa segunda parte salió a relucir lo mejor de cada uno.

Gonzalo Yeguer agarró mil pelotas sin dar rebote, Lucas Damm puso mil candados en la banda derecha, Tomás Rodríguez dio mil gritos de orden, Ema Villar cabeceó mil pelotas, Julián Kletzel bancó mil embates de Pampero, Juanda Mosmann hizo mil toques de magia, Hilario Córdoba se compró mil metros de mediocampo, Diego Díaz hizo mil quiebres de cintura, Nico Leonhart hizo mil relevos prolijos y en silencio, Blas Castaño intentó mil desbordes por izquierda, Adrián Braun bancó mil pelotas en ofensiva , Joaquín Campo corrió mil bochas arriba y César Graff hizo mil pases bien.

Al final, el árbitro sentenció la historia, Huracán fue merecido campeón, con un grupo que la peleó desde atrás, con pibes que son, sobre todo, buenas personas, con gente como Juan Ludueña y Beto Giles dando una mano y enseñando como tiene que ser, con los hinchas haciéndoles sentir acompañados a los chicos, con la familia de Huracán, al final, festejando y cantando, como se debe “Dale Campeón!”.

La Nota

A nadie le gusta perder, es cierto, y en la impotencia de ser el segundo muchas veces uno reacciona con furia.  No fue el caso de la gente de Pampero, de los chicos y el Cuerpo Técnico, que al finalizar el partido aplaudieron a Huracán.  Para imitar.

SÍNTESIS

CANCHA: Deportivo Alpachiri, Final de 4ta. División

HURACÁN: Gonzalo Yeguer; Lucas Damm, Tomás Rodríguez Méndez, Emanuel Villar y Julián Kletzel; Juan Daniel Mosmann, Hilario Córdoba, Nicolás Leonhart y Blas Castaño; Adrián Braun y Diego Díaz. DT: Juan Ludueña, Ayudante de Campo: Beto Giles.

CAMBIOS: Joaquín Campo por Blas Castaño y César Graff por Diego Díaz.

SUPLENTES: Quito Villar e Ignacio Córdoba.

GOLES: Diego Díaz y Emanuel Villar.

CAMPEÓN: Club Atlético Huracán.

Por Peña La Plata/BA